Érase una vez un rey que vivía en un castillo. Era un rey peculiar. Gobernaba todo su reino sin salir de su castillo. No tenía contacto directo con el mundo exterior, por lo que no hablaba cara a cara con los ciudadanos, ni iba a reuniones o fiestas y sin embargo, controlaba absolutamente todo lo que pasaba en su reino.
El rey mandó construir su castillo en la mejor posición estratégica, en lo alto de una pequeña colina desde la cuál se divisaba toda la ciudadela. Repartidos por todo el reino, tenia informadores que puntualmente le contaban todo lo que ocurría. Lo hacían mediante un sistema de cables que llegaba hasta el castillo. No vivía la realidad, se la contaban y él la interpretaba a su manera. Su idea de la realidad era aproximada. Además el mundo había cambiado mucho desde que no salía de su castillo y su forma de ver la vida era muy anticuada. Aún así el sistema funcionaba bien: recibía la información, la interpretaba y decidía: encendía las alarmas, ponía a trabajar a los obreros, mandaba su guardia real... siempre con el objetivo de proteger a sus ciudadanos. Cuando éstos no querían que el rey se enterase de alguna cosa, emborrachaban con cerveza a los informadores para que fueran incapaces de informar. Por lo demás el rey estaba al tanto de todo lo que pasaba.
Una mañana, cuando todos los ciudadanos trabajaban afanados, sin que nadie lo esperase, apareció el basto ejército de un reino vecino con la intención de invadirles. Cientos de hombres montados en imponentes caballos, pertrechados con aceradas armaduras y poderosas espadas acechaban el reino. La imagen era sobrecogedora, el miedo y la angustia se apoderaron de todo el reino.
Comenzaron a caer pedruscos, los ciudadanos estaban muertos de miedo y los informadores empezaron a mandar toneladas de información de peligro. El rey jamás había recibido tal avalancha de peligro en su tranquilo reino, se sintió completamente desbordado. Preso del pánico comenzó inmediatamente a encender todas las alarmas y puso en pie de guerra toda su guardia. Revolucionó a todo su reino ante aquella terrible amenaza.
Aquellos bárbaros trataron de escalar las murallas pero no fueron capaces de penetrar en el reino. Las paredes eran enormes y las puertas extremadamente robustas. A pesar de lo cobardes y miedosos que eran los ciudadanos, eran excelentes artesanos y habían construido una fortificación grandiosa. Los pedruscos causaron daños pero no fue nada grave.
Pasadas unas horas, los invasores al fin se fueron. Los ciudadanos estaban sobrecogidos, pero al ver que todo había pasado sin mayores consecuencias empezaron a tranquilizarse. Los informadores contaron al rey que había algunos daños, que se fueron arreglando para que se apagasen las alarmas.
Sin embargo, para sorpresa de los ciudadanos, una vez solucionado todo, las alarmas seguían sonando. Nadie entendía nada, el peligro había pasado y los desperfectos habían sido arreglados.
Para tratar de controlar la situación los ciudadanos usaron su remedio, dieron cerveza a los informadores. Las alarmas cesaron un poquito pero apenas surgió efecto cuando otras veces era un método muy efectivo. ¿Qué ocurría? Fueron pasando los días y las alarmas se calmaron pero no desaparecían del todo. Los ciudadanos no sabían como controlar aquello y la vida diaria era muy difícil en aquellas circunstancias.
A la semana siguiente apareció un circo ambulante. Trapecistas, animales exóticos, música, payasos... Todos en el reino estaban entusiasmados, hacía mucho tiempo que no tenían la oportunidad de disfrutar del circo y por momentos se olvidaron de las alarmas.
De pronto, y sin motivo aparente, saltaron todas las alarmas violentamente, la guardia real comenzó a cargar contra el animado circo y todo el reino se sumió en el más absoluto caos. Nadie entendía nada, aquello no era ninguna amenaza, todo lo contrario. ¿Qué ocurría?
La situación era insostenible, los ciudadanos acordaron hacer un pedido grandísimo de bebidas alcohólicas. Los distribuidores de alcohol se frotaban las manos con el negocio que estaban haciendo. Y aunque el alcohol no hacía el efecto esperado y mermaba la salud de los informadores, seguían comprándolo porque era el único remedio. Saltaba una alarma, iban a dicha zona y emborrachaban al informador con tequila, que era lo más fuerte que tenían, pero las alarmas no cesaban.
La situación era insostenible, los ciudadanos acordaron hacer un pedido grandísimo de bebidas alcohólicas. Los distribuidores de alcohol se frotaban las manos con el negocio que estaban haciendo. Y aunque el alcohol no hacía el efecto esperado y mermaba la salud de los informadores, seguían comprándolo porque era el único remedio. Saltaba una alarma, iban a dicha zona y emborrachaban al informador con tequila, que era lo más fuerte que tenían, pero las alarmas no cesaban.
¿Por qué no hacía efecto emborrachar a los informadores? ¿Por qué el rey activaba los protocolos de emergencia? Todo el reino se estaba volviendo loco, aquello era insostenible. Nunca antes había pasado algo semejante.
Pasaron los días y las alarmas seguían sonando, unas veces más fuerte, otras más suave pero siempre presentes. Los ciudadanos estaban abatidos, era imposible vivir así, algo pasaba en el reino que hacía saltar las alarmas. El gran problema era que aparentemente todo estaba bien. Con el tiempo la cosa no hizo sino empeorar, las alarmas se encendían continuamente y el tequila no hacía efecto. La alarma no cesaba. ¿Por qué? Estaban desesperados, no podían trabajar, ni dormir, ni jugar... sus vidas se convirtieron en un infierno.
Consultaron con todo tipo de especialistas. Todos coincidían: en el reino no había nada estropeado, nada que justificase las alarmas. Éstas solo se encendían cuando algo iba mal y tras informar al rey de ello, que era el responsable último. Pero si aparentemente todo iba bien y además los informadores estaban borrachos ¿por qué se encendían las alarmas?
Los especialistas a los que consultaban ya no sabían que decirles. Les mandaban a otros especialistas que a su vez les derivaban a otros que les decían lo mismo. Todo estaba en orden. Algunos llegaron a sugerir que el problema era el rey, estaba loco. Aquello indignó a los ciudadanos. Amaban a su rey por encima de todo. Estaban convencidos de que algo iba mal y la solución era encontrar ese fallo.
Siguieron peregrinando por todo tipo de especialistas que no dieron solución a sus problemas. Es más, ni tan siquiera llegaron a sentirse entendidos.
Un día apareció por el reino un viajero que estaba de paso. Le acogieron encantados. Los ciudadanos le contaron su grave problema, su desesperación por no poder solucionarlo y su incomprensión por parte de los especialistas. El viajero se dedicó a escucharles con atención, se compadecía del sufrimiento que padecían pero al mismo tiempo se interesaba cada vez más por aquella extraña situación, ¿Qué estaba pasando en aquel reino?
El viajero pensaba en cómo podía ayudarles, a pesar de no ser considerado un especialista en alarmas, tenía intuiciones muy afinadas y empezó a preguntarse como funcionaba todo aquel sistema.
Los ciudadanos ponían todo su empeño en que alguien encontrase lo que supuestamente funcionaba mal pero, ¿realmente había algo estropeado? El sistema de alarmas, en si mismo, aparentemente funcionaba bien. Parecía más un sobre funcionamiento que una avería. Empezó a intuir que el problema podía ser del rey, como sugerían algunos especialistas. Pero no en el modo en que éstos sugerían. El rey no estaba loco, muy al contrario, parecía estar muy cuerdo. Amaba a su reino y todo lo que hacía era por el bien de su pueblo. Tenía que tener alguna razón para encender las alarmas.
¿En qué se basaba el rey para encender las alarmas si los informadores estaban bebidos y además no había nada roto?, a parte de los cables, ¿llegaba más información al castillo del rey? Ciudadanos y expertos pensaban que el rey solo se basaba en la información de los cables para encender las alarmas. Si saltaban las alarmas era porque algo iba mal, porque los informadores lo comunicaban al rey y porque este había evaluado que era peligroso. Él no estaba tan seguro de eso, así que siguió investigando.
Había algo que llamó su atención: Los ciudadanos, a pesar de vivir en un lugar muy seguro, tenían muchos miedos. Vivían con desasosiego, siempre alerta de posibles peligros, inquietos y con preocupaciones por el futuro, por sus familias, por ellos mismos... la angustia era constante en sus vidas ¿tendría algo que ver en las alarmas?, ¿era el rey tan miedoso como sus ciudadanos?
Como no podía ponerse en contacto con el rey buscó a los más ancianos del reino, que le conocieron en su niñez, para preguntarles cómo era el rey. Encontró varios ancianos que le hablaron de él. Contaban que el rey fue un niño miedoso, reservado y enfermizo. No tenía gran seguridad en si mismo y tuvo alguna experiencia dura, como cuando casi es devorado por un oso en una cacería, que le hizo si cabe, ver la vida más amenazante aún y ser más prudente. Era extremadamente prudente. Y esa forma de ser era su forma de gobernar. Estaba atento siempre a las informaciones que le llegaban y ante la duda hacía saltar todas las alarmas. Y después del intento de invasión su prudencia se acentuó aún más.
Siguió preguntando a los más mayores y encontró un señor que trabajó dentro del castillo sirviendo al rey durante muchos años. Le preguntó por su gran duda ¿El rey se basa solo en la información que le llega por los cables o hay otras fuentes de información?
El anciano quedó asombrado por su pregunta: ¡cómo se va a basar el rey solo en la información que llega por los cables!
El castillo estaba estratégicamente situado en lo alto de la colina, desde donde se divisaba todo el reino. Hasta allí llegaban sonidos del exterior. Además, podía asomarse a las ventanas para ver, aunque no fuera nítidamente, qué hacían sus ciudadanos o si acechaban enemigos en el horizonte... la información de los cables solo era una parte de la información que le llegaba.
El rey se estaba basando en las reacciones de sus ciudadanos y en lo que él intuía que pasaba por lo que veía desde el castillo para encender las alarmas. Situaciones que a pie de calle los cuidadanos no veían como peligros sino como inconvenientes darios, e incluso situaciones nuevas pero en absoluto peligrosas, eran vistas desde el castillo como posibles amenazas. El rey prudente.
El rey se estaba basando en las reacciones de sus ciudadanos y en lo que él intuía que pasaba por lo que veía desde el castillo para encender las alarmas. Situaciones que a pie de calle los cuidadanos no veían como peligros sino como inconvenientes darios, e incluso situaciones nuevas pero en absoluto peligrosas, eran vistas desde el castillo como posibles amenazas. El rey prudente.
Los ciudadanos eran muy miedosos, y sus propias reacciones de miedo hacían que el rey reaccionase con miedo. El día del intento de invasión, desde el castillo oyó como huían sus ciudadanos, como rechinaban las espadas, los golpes de las piedras, los gritos de los soldados, veía el ejército a lo lejos... todo esto más la información de los cables hizo que se sintiese aterrorizado. Aunque no hubiera señales de peligro seguía encendiendo las alarmas ante cualquier cosa que viera u oyera desde su castillo, aunque los informadores no mandasen señal de peligro. Estaban emborrachando a los informadores, gastando mucho dinero en bebidas y perjudicándoles su salud cuando éstos no eran el problema.
Las alarmas se encendían por lo que el rey intuía. El día en que llegó el circo, los informadores no mandaron ninguna señal de peligro, pero el rey vio a lo lejos caballos, alboroto, extraños... y no dudó un instante en encender todas las alarmas y dispersar el circo.
Las alarmas se encendían por lo que el rey intuía. El día en que llegó el circo, los informadores no mandaron ninguna señal de peligro, pero el rey vio a lo lejos caballos, alboroto, extraños... y no dudó un instante en encender todas las alarmas y dispersar el circo.
La solución al problema era sencilla pero difícil de llevar a cabo. Los ciudadanos esperaban el especialista que les dijese: ¡ésto es lo que está mal! ¡se pone uno nuevo y listo! Pero eso no iba a ocurrir.
La solución estaba en ellos. No existía la bebida capaz de eliminar las señales en las que se basaba el rey para alarmar a su reino. Tenían que aprender a vivir y superar miedos. No se podía hablar directamente con el rey y razonar con él. En la medida en que los ciudadanos fueran cogiendo confianza en ellos mismos y superasen sus miedos y ansiedades demostrarían al rey que hay muchas situaciones que no son potencialmente peligrosas. Éste se haría también más fuerte y dejaría de alertar por cualquier cosa, las alarmas cesarían y vivir una vida volvería a ser posible.
El viajero sabía que muchos ciudadanos no le entenderían, no era fácil entender como funcionaba el sistema de alarmas del rey. Pero quizá otros si, y dejarían de esperar milagros de los especialistas y empezarían a crecer para lograr una vida sin dolor.
Con la colaboración especial de:
El rey TU CEREBRO INCONSCIENTE
Los ciudadanos PACIENTES DE FIBROMIALGIA
Alarmas DOLOR
Los informadores, sistema de cables NOCICEPTORES
Distribuidores alcohol LABORATORIOS FARMACÉUTICOS
Cerveza, Tequila ANALGÉSICOS QUE NO FUNCIONAN
Ejercito invasor SITUACIONES LÍMITE
Oso SITUACIONES LÍMITE
Circo SITUACIONES MAL EVALUADAS
Viajero UN PSICÓLOGO
Historia basada en hechos reales:
El dolor siempre es una decisión de nuestro cerebro inconsciente, haya o no haya tejido dañado (Butler y Moseley, 2010).
El dolor es una construcción cerebral, como por ejemplo los colores. Aunque resulte contraintuitivo los colores no existen ahí fuera, en el mundo, son una construcción cerebral. A nuestros ojos no llegan colores, llegan longitudes de onda. Los colores los fabrica el cerebro, como demuestra el controvertido vestido de Buzzfeed (más información)
Todas nuestras percepciones, vista, oído, dolor... son fabricadas por el cerebro (más información). Los tejidos no tienen la capacidad de doler. Tú sentirás el dolor en tu espalda, rodilla, mano... pero el dolor no surge ahí, es el cerebro el que crea el dolor, en respuesta a la información que le llega por medio de unas neuronas especializadas no en detectar dolor, porque el dolor no es una entidad detectable, sino en detectar estados nocivos, llamadas nociceptores. El dolor no se detecta, se crea. Como los colores. (más información).
El dolor es una construcción cerebral, como por ejemplo los colores. Aunque resulte contraintuitivo los colores no existen ahí fuera, en el mundo, son una construcción cerebral. A nuestros ojos no llegan colores, llegan longitudes de onda. Los colores los fabrica el cerebro, como demuestra el controvertido vestido de Buzzfeed (más información)
Todas nuestras percepciones, vista, oído, dolor... son fabricadas por el cerebro (más información). Los tejidos no tienen la capacidad de doler. Tú sentirás el dolor en tu espalda, rodilla, mano... pero el dolor no surge ahí, es el cerebro el que crea el dolor, en respuesta a la información que le llega por medio de unas neuronas especializadas no en detectar dolor, porque el dolor no es una entidad detectable, sino en detectar estados nocivos, llamadas nociceptores. El dolor no se detecta, se crea. Como los colores. (más información).
Esto no quiere decir que el dolor fibromialgíco, sin daño aparente, sea psicológico o de segunda. Todos los dolores nacen en el cerebro, llámalo psicológico, neurológico, psiconeurológico...
La distinción dolor físico/dolor psicológico es errónea (más información). En origen todos los dolores nacen en el cerebro inconsciente, lo que varía es la fuente por la cual éste ha detectado peligro, física (cables/nociceptores, daño físico) o psicológica/emocional (miedos, ansiedad...).
El dolor fibromiálgico sin causa aparente es un dolor tan incapacitante como el dolor acompañado de daño físico. El daño físico no predice la intensidad del dolor, es la evaluación de amenaza que hace el cerebro inconsciente el predictor exacto de la intensidad del dolor. (Efecto Anzio, Henry Beecher).
La distinción dolor físico/dolor psicológico es errónea (más información). En origen todos los dolores nacen en el cerebro inconsciente, lo que varía es la fuente por la cual éste ha detectado peligro, física (cables/nociceptores, daño físico) o psicológica/emocional (miedos, ansiedad...).
El dolor fibromiálgico sin causa aparente es un dolor tan incapacitante como el dolor acompañado de daño físico. El daño físico no predice la intensidad del dolor, es la evaluación de amenaza que hace el cerebro inconsciente el predictor exacto de la intensidad del dolor. (Efecto Anzio, Henry Beecher).
El inconsciente no está en contacto directo con la realidad, como el rey prudente, la construye a partir de la información que le llega. Por eso mismo, una experiencia emocional negativa extrema en la que no haya tejido dañado, puede sin embargo ser evaluada como un peligro para tu integridad, y el dolor es la manera que tiene nuestro inconsciente de alertarnos de que algo va mal. Miedo y dolor evolucionaron juntos (Stamos 2003).
Esto es posible porque el cerebro procesa la información de dolor físico y de dolor emocional en la misma zona cerebral (Eisenberg y Lieberman, 2004). Desde tu percepción consciente sabes que la angustia, la indefensión o el terror no te causarán la muerte directa, pero tu inconsciente puede llegar a esa conclusión y mandarte dolor como forma de protegerte de lo que cree son peligros. Recoge información e interpreta. No exactamente, es algo aproximado. Y si llega a la conclusión de que hay peligro, una de sus herramientas para ayudarte es mandarte dolor (si, aunque no lo creas trata de ayudarte). Su naturaleza es ser prudente y tus miedos le han hecho serlo aún más. Su política es "más vale prevenir que lamentar". El rey prudente.
Esto es posible porque el cerebro procesa la información de dolor físico y de dolor emocional en la misma zona cerebral (Eisenberg y Lieberman, 2004). Desde tu percepción consciente sabes que la angustia, la indefensión o el terror no te causarán la muerte directa, pero tu inconsciente puede llegar a esa conclusión y mandarte dolor como forma de protegerte de lo que cree son peligros. Recoge información e interpreta. No exactamente, es algo aproximado. Y si llega a la conclusión de que hay peligro, una de sus herramientas para ayudarte es mandarte dolor (si, aunque no lo creas trata de ayudarte). Su naturaleza es ser prudente y tus miedos le han hecho serlo aún más. Su política es "más vale prevenir que lamentar". El rey prudente.
Esta es la razón por la cual los analgésicos (emborrachar a los informadores) tienen un efecto muy limitado en los fibromiálgicos, placebo en mi opinión (más información), y son curiosamente los antidepresivos el medicamento de primera elección en un síndrome de dolor como es la fibromialgia (Hauser y Bernardy, 2009).
Los analgésicos nunca actúan en el tejido dañado. Actúan en el nociceptor que lleva la información de nocividad, de que algo va mal (en el cable). Al tomarte un analgésico cuando tienes una herida, consigues que no llegue la información de que algo va mal al cerebro, consecuentemente dejará de mandar dolor. Cuando se empieza a pasar el efecto del analgésico comienza a llegar información nociva y el cerebro empieza a mandar dolor de nuevo, se está basando en información física (más información). Pero el analgésico no hace nada en la zona dañada.
En la fibromialgia, tu inconsciente no se está basando en información física para mandar dolor. Se está basando en tus miedos, tu ansiedad... Y los antidepresivos, aunque limitados, son más efectivos en ese tipo de "vía" que los analgésicos.
Los analgésicos nunca actúan en el tejido dañado. Actúan en el nociceptor que lleva la información de nocividad, de que algo va mal (en el cable). Al tomarte un analgésico cuando tienes una herida, consigues que no llegue la información de que algo va mal al cerebro, consecuentemente dejará de mandar dolor. Cuando se empieza a pasar el efecto del analgésico comienza a llegar información nociva y el cerebro empieza a mandar dolor de nuevo, se está basando en información física (más información). Pero el analgésico no hace nada en la zona dañada.
En la fibromialgia, tu inconsciente no se está basando en información física para mandar dolor. Se está basando en tus miedos, tu ansiedad... Y los antidepresivos, aunque limitados, son más efectivos en ese tipo de "vía" que los analgésicos.
Que a ti te duela, y mucho, una zona del cuerpo no quiere decir sistemáticamente que haya algo mal en esa zona. Puede ser el lugar al cuál el cerebro dirige una alarma consecuencia de una evaluación de peligro, procedente de una experiencia emocional negativa y extrema sin tejido dañado.
Vivir una situación emocional negativa extrema, o tener muchos miedos e inseguridades, puede hacer que tu inconsciente se sensibilice y esté alerta a todo tipo de situaciones, y mande dolor para tratar de protegerte de lo que considera peligros para tú integridad.
El inconsciente es como un niño de 4 años. ¿Cuándo se da cuenta ese niño de que la situación es peligrosa? Cuando te ve a ti, adulto, temer. Mientras tú estés tranquilo, él está tranquilo. Si tienes fibromialgia a buen seguro eres una persona insegura y miedosa, o has pasado por alguna experiencia emocional negativa extrema que te desbordó. El punto es que tu inconsciente no confía en ti y en tus recursos para manejarte en el mundo. Su principal misión es que sobrevivas, así que prefiere mandarte dolor y que estés quieta a que te ocurra algo irremediable.
Tratar de explicarle civilizadamente que los peligros que supone no son tales es en vano. No te va entender. El inconsciente no razona. Se basa en esos temores que sientes, en esos miedos que condicionan tu vida. Emociones negativas que interpreta como peligro.
Superar la fibromialgia pasa por vencer tus miedos y aprender a manejarte con soltura en la vida. Y dominar determinados miedos y autotorturas diarias puede ser más fácil de lo que crees, busca ayuda profesional.
Mientras no demuestres a tu inconsciente que puede confiar en ti, va a seguir encendiendo las alarmas.
Superar la fibromialgia pasa por vencer tus miedos y aprender a manejarte con soltura en la vida. Y dominar determinados miedos y autotorturas diarias puede ser más fácil de lo que crees, busca ayuda profesional.
Mientras no demuestres a tu inconsciente que puede confiar en ti, va a seguir encendiendo las alarmas.
Enhorabuena. Me parece muy acertada la manera de explicarlo.
ResponderEliminarMuchas gracias Rafael :)
Eliminargracias,desde argentina.aceradisimo,me gusto mucho el relato.
ResponderEliminarMuchas de nadas desde España nubee!!
EliminarMuy buen articulo y muy acertado. Por eso hice un comentario de buscar ayuda alternativa. En mi caso Reiki, meditación, y bajar la ansiedad, con la respiración profunda(meditación).
ResponderEliminarGracias por ocuparse de nosotros.
Argentina
Hola Sandra,
EliminarMuchas gracias! Aquí estamos trabajando este enfoque del dolor basado en los trabajos de Arturo Goicoechea un grupo de médicos, fisioterapéutas y psicólogos que está dando muy buenos resultados.
Iré poniendo más información
Un saludo
Los cuentos suelen ser reflejos de la vida real y me ha encantado cómo has relatado la experiencia de la fibromialgia y cómo luego lo has explicado, Muchas gracias! Personalmente también estoy trabajando para que mi inconsciente empiece a confiar en mí.
ResponderEliminarHola Jennifer,
EliminarLa clave, con bien señalas, está en el inconsciente. y los cuentos ayudan a soslayar la mente consciente disparando al incosciente. Iré poniendo más formas sencillas de trabajarlo por si te puede ser de ayuda.
Un saludo!
Desde hace años estoy diagnosticada de fibromialgia entre otras dolencias. Hace poco fui a un grupo donde hablamos de FM y SFC, algunas de las cosas que tratamos estan ligadas a este relato, el cual ha hecho que pueda plantearme la situación de otra manera. Me ha encantado. Gracias por compartir.
ResponderEliminarHola Imna,
EliminarMe alegra mucho que se esté usando, es el camino para poder superar estas dolencias. Iremos poniendo más información. Ojalá os sean útiles.
Un saludo!
en mi caso, yo creo q como anillo al dedo
ResponderEliminarMe alegro de que te resuene Arianna. Estoy preparando una web basada en este enfoque, con mucha mas información. Si te interesa ya te la pasaré. Un saludo
ResponderEliminarGracias por la explicación, la verdad es que me cae como anillo al dedo!!!... Siempre tengo mas dolor y agotamiento a raíz de situaciones emocionales que no puedo manejar, pero hasta ahora no lo había relacionado....mil gracias por la ayuda!!!!
ResponderEliminarHola Patty,
ResponderEliminarEsta muy relacionado si. Si quieres profundizar mas visita: descifratudolor.com
Encontraras mas articulos y un pequeno libro gratuito para descargarte
Un saludo!! ;)
Hola Patty,
ResponderEliminarEsta muy relacionado si. Si quieres profundizar mas visita: descifratudolor.com
Encontraras mas articulos y un pequeno libro gratuito para descargarte
Un saludo!! ;)
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarHe encontrado este articulo buscando más información gracias al articulo publicado hoy en la Vanguardia digital. Se lo he imprimido a mi madre para que se lo pueda leer con tranquilidad ya que esta diagnosticada de fibromialgia desde hace muchos años, ahora enmascarada por la edad y la artrosis.
ResponderEliminarTambién veo de mucha utilidad todos los consejos para mi, que padezco migraña desde mi infancia.
Seguiré buscando artículos. Muchas gracias
Hola Laura,
EliminarMándame un email a davidsojo@gmail.com y te mando algo más sobre el tema.
Un saludo!
Hola David
ResponderEliminarHe visto tu colaboración en la Vanguardia y me ha resultado muy interesante. Tanto que he leído el cuento del rey prudente y algunos textos de Arturo Goicoechea. Llego a la conclusión de que muchos de nuestros dolores, al menos a los de origen no lesional, podríamos ponerles un control cerebral. No he visto qué técnica se puede seguir para ello. Últimamente estoy muy interesado en mindfulneess y leyendo algo de Jon Kabat-Zinn y me pregunto si es de aplicación. Yo creo que sí pero me gustaría saber tu opinión. Gracias.
Mándame un correo a davidsojo@gmail.com y te paso alguna cosa más sobre este enfoque
EliminarUn saludo!
Por ejemplo; yo sufro de migrañas desde el comienzo de mi adolescencia, el desarrollo, digamos, cuando una se va haciendo mujer. Al haber sido criada como toda clase de castigo por sentir, ser un ser sensual, con todas las represiones habidas y por haber, se supone que he desarrollado temor a los hombres, o sentir que, son algo malo, por lo tanto el contacto con ellos traerá un dolor similar a los castigos; y aunque ya no esté las personas encargadas de infligir este dolor, el cerebro, al acercarse la posibilidad de tener placer con un hombre, lo tomará como acecho, como peligro, y mandará dolor. Ya sea por medio de vaginitis, herpes vaginal, hemorroides, infección urinaria, o un golpe o migraña, desencadenadas en el momento menos oportuno para el placer, pero sí oportuno para "evitar el peligro", o sea, mejor un dolor que someterse al objeto que lo causa.
ResponderEliminarMiedo, fobia a los hombres "malos", internalizado a temprana edad entre la "educación" de casa, y del colegio de monjas.
Muy claro lo veo ahora, ahora mismo, ya !
No por casualidad llegué hasta aquí ...
Cómo cambiarle la información a mi cerebro ?
Porque también es adicto a las emociones negativas, las que también ocasionarán dolor.
Cómo hacer ? meditar ¿¿¿?????
Qué bueno haberme hecho tantas veces la pregunta: por qué ??? porque en algún momento llegaría la respuesta.
Ahora, la solución !!!!!
Muchos y agradecidos saludos !!!
As a sign of gratitude for how my son was saved from fibromyalgia , i decided to reach out to those still suffering from this.
ResponderEliminarMy son suffered fibromyalgia in the year 2013 and it was really tough and heartbreaking for me because he was my all and the symptoms were terrible, he always complain of joint stiffness, and he always have difficulty falling asleep . we tried various therapies prescribed by our neurologist but none could cure him. I searched for a cure and i saw a testimony by someone who was cured and so many other with similar body problem, and he left the contact of the doctor who had the cure to fibromyalgia . I never imagined fibromyalgia has a natural cure not until i contacted him and he assured me my son will be fine. I got the herbal medication he recommended and my son used it and in one months time he was fully okay even up till this moment he is so full of life. fibromyalgia has a cure and it is a herbal cure contact the doctor for more info on drwilliams098765@gmail.com on how to get the medication. Thanks for reading my story